Muy buenos días a todas las personas en esta ocasión nos acompañan a escuchar y compartir quien sin duda es una mujer y profesional de la salud comprometida, respetada y admirada por todas aquellas personas que luchan porque existan disponibles y accesibles para las mujeres servicios de salud sexual reproductiva de calidad, y en particular, servicios adecuados de aborto. Nuestra invitada, la Dra. Maureen Paul, es ginecóloga, Presidenta de la Junta de Directores del National Abortion Federation, directora médica de Planned Parenthood en Boston, investigadora y autora de importantes artículos científicos sobre el aborto, profesora en la Universidad de Massachusets y sobre todo una mujer incansable y comprometida con la lucha por un mundo menos injusto para las mujeres.

Agradecemos su viaje a Puerto Rico en un momento de tantas tensiones , y en un momento en el que nuestras libertades civiles, y derechos humanos se ven tan amenazados y vulnerables. Parecería mentira que en pleno siglo 21, una situación tan cotidiana y normal y de tan de larga historia, como lo son los embarazos no deseados, y la necesidad de los servicios de aborto, enfrente todavía los obstáculos, la incomprensión,la falta de información, el rechazo, y el estigma de diversos sectores de nuestra sociedad. Si bien hay algunos sectores, como el tradicional religioso, y el político, que persisten en actitudes y legislaciones en contra del aborto, hay otros sectores, como el feminista, y el de la salud, en el que todavía sorprende la falta de información y actitud de rechazo al tema del aborto.

Con ánimo de informar y estimular a que continuemos pensando estrategias que adelanten nuestras luchas voy a dar ejemplos muy concretos que documentan esta situación en nuestro país. Tan reciente como la semana pasada, nuestro proyecto tuvo conocimiento de una situación bastante frecuente en hospitales públicos donde personal médico, (en este caso fueron enfermeras, pero conozco otros casos de médicos) intentan obstaculizar la terminación de embarazo autorizado por un médico. Otros casos acaecidos meses atrás, documentan la hostilidad y falta de compasión de médicos hacia mujeres que llegan a una sala de emergencia con abortos incompletos, producto, por ejemplo del uso de cytotec. Conozco también de casos, en que mujeres que han llamado al Departamento de Salud en busca de información sobre aborto,y obtienen información falsa cuando la persona que contesta el teléfono dice que el aborto es ilegal en Puerto Rico. Y también, hay otros casos, en que se hace patente la desinformación sobre el aborto, como por ejemplo, la ignorancia sobre la legalidad del aborto en países de nuestra región como Guyana, San Martín, Martinica, Guadalupe, Islas Vírgenes,Barbados, entre otras.

Por otro lado es sorprendente la enorme confusión que existe todavía en cuanto a modificaciones a la ley y al estado de derecho sobre el aborto. Recientemente, un director médico de un hospital desconocía cuál era el estado de derecho en lo relativo al sistema de trimestres, y equivocadamente alegaba que en Puerto Rico sólo se permitían abortos durante el primer trimestre. Este mismo error lo repitieron los residentes de ob/gyn en una encuesta realizada por nuestro proyecto en 1997. En otra encuesta de 1998, la mayoría de un grupo de estudiantes graduadas de enfermería, opinó que el aborto era ilegal en Puerto Rico Otro ejemplo del estigma que todavía prevalece sobre el tema es que en una publicación de un centro académico que trabajan con el tema de mujer y salud, la palabra aborto senciallamente no aparece, (sólo en una ocasión en una referencia estadística) y, el tema nunca ha sido abordado con profundidad.

A esto hay que añadirle el clima político que sobre el aborto ha prevalecido en Puerto Rico. Desde la legalización del aborto en Estados Unidos en 1973, todos y cada uno de los gobernadores, incluyendo, la actual gobernadora, han dicho oponerse al aborto. Ninguno ha dicho ser pro-opción, y nunca ningún legislador o legisladora, hasta la fecha, ha asumido una actitud de liderato en defender el derecho a decidir. Sin embargo, debo reconocer, que al menos, este gobierno nombró como Procuradora de la Mujer a la Lcda. Fernós quien ha sido una defensora del derecho al aborto. Confiamos que este nombramiento contribuya a darle mayor visibilidad al tema y que desde esta agencia se luche para que las políticas públicas de salud verdaderamente reconozcan la legalidad del aborto y faciliten el acceso a los servicios de aborto. En la actualidad, la práctica prevaleciente en el sistema de salud pública constituye otra forma más de discriminación contra la mujer, aunque no quiere reconocerse de esta manera.

En 1998 comenzamos desde Pro Mujer en Cayey el Proyecto de Transformación Curricular en Salud Sexual Reproductiva comprometido en fomentar la educación, discusión y entrenamiento sobre diversos temas del campo de la salud sexual reproductiva en escuelas de medicina, de enfermería y otros centros académicos . Fundaméntandonos en diversas investigaciones, hemos dado prioridad al aborto y la anticoncepción dada las carencias y necesidades que hemos constatado sobre el tema. Entre las actividades desarrolladas están cursos en la Escuela de Medicina,en la Escuela de Enfermería, Seminarios de Facultad, becas de entrenamiento para residentes, enfermeras, becas para asisitir a conferencias para estudiantes de medicina, conferencias sobre aborto a diversos sectores de profesionales de la salud, nuestro website saludpromujer, y para el próximo semestre tendremos completada la nueva encuesta sobre aborto en Puerto Rico. Nada de esto hubiera sido posible sin el apoyo finacniero de varias fundaciones en Estados Unidos y la colaboración y apoyo del personal de nuestro proyecto.

Vaya también mi agradecimiento a todas y todos los que han dicho presentes a esta actividad: representantes de organizaciones no gubernamentales,( PRO FAMILA, el Grupo Pro Derechos Reproductivos, proveedores de servicios de aborto y el personal de apoyo de las clínicas, enfermeras parteras, profesionales de la salud, estudiantes, prensa. Estoy segura que al igual que los residentes y estudiantes que la han escuchado, ustedes coincidirán en la calidad y altura rofesional de la Dra. Paul. No es casualidad que sea ella la Presidenta de la Junta del National Abortion Federation. La Dra. Paul ha sido también pionera en el ofreciemiento de servicios de salud para las mujeres al ser co-fundadora de una de las primeras clínicas feministas de salud para la mujer en Seattle, Estados Unidos. Su compromiso como profesional de la salud la lleva a arriesgar su propia vida diariamente porque cree que es fundamental garantizar el que las mujeres tengamos servicios de aborto de calidad. Este tipo de compromiso es muy especial, y constituye sin duda un modelo de servicios de salud, pero sobre todo, un modelo humano del que debemos de aprender. No en balde sus vecinos enfrentaron a los piquetes de los grupos anti aborto, con demostraciones de apoyo en las que se hacía elocuente su respeto y admiración por su compromiso como profesional de la salud. Es un privilegio tener a una invitada tan completa, tan transparente en su compromiso político, y tan sólidamente preparada a nivel científico. Sin más preámbulos dejo con ustedes a la Dra. Maureen Paul.