Valientes y dispuestos a dar la milla extra. Así se resume la dedicada labor de los especialistas en Enfermedades Inflamatorias del Intestino (EII) ante el aumento en el número de intervenciones quirúrgicas a los pacientes con Crohn y Colitis Ulcerosa en Puerto Rico, indicó en entrevista exclusiva el doctor Juan Lojo, catedrático del Departamento de Cirugía de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas (RCM).
Las expresiones del doctor Lojo se dieron en el marco de la celebración del Sexto Simposio Viviendo con Crohn y Colitis Ulcerosa: Hacia el Futuro, capitaneado por la doctora Esther Torres, pionero en Puerto Rico en el tratamiento de Enfermedades Inflamatorias del Intestino (EII) que se llevó a cabo en el Anfiteatro del RCM en horas de la mañana.
La enfermedad del Crohn puede afectar cualquier área del tracto gastrointestinal, desde la boca hasta el ano, pero se encuentra más al final del intestino delgado y al comienzo del intestino grueso (colon).
Los síntomas pueden confundirse con síntomas similares a otros trastornos gastrointestinales y pudiera ser una condición incapacitante. Según el último estudio en el 2005 por la Unidad de Investigación de Gastroenterología del RCM sobre la prevalencia de estas enfermedades, en Puerto Rico se registran 38.2 casos por cada 100,000 habitantes en la isla, siendo colitis ulcerosa la más común.
El evento se llevó a cabo en la misión de la Fundación Esther A. Torres (FEAT), liderada por la doctora Torres, de continuar promoviendo el buen manejo clínico de ambas condiciones en Puerto Rico y ofrecerle apoyo a todos los pacientes que enfrentan estas condiciones hoy día en Puerto Rico.
El doctor Lojo, cirujano, señaló que hoy día los especialistas evalúan y tratan a pacientes con Crohn y Colitis Ulcerosa en estadios más agresivos donde se encuentran mayores perforaciones a nivel de intestino.
“He percibido en la práctica que ha aumentado el número de pacientes que llegan con penetraciones y perforaciones intestinales tanto en Crohn como en Colitis Ulcerosa, especialmente la de Crohn, tanto en varones como en féminas”, explicó el Doctor, al tiempo que sostuvo que anualmente el podría intervenir unos 200 pacientes con EII.
“Lo que nos preocupa es que estamos viendo estas condiciones en pacientes más jóvenes de 13 y 14 años. Sabemos de pacientes pediátricos que ya tienen un diagnóstico”, relató el doctor, quien se ha destacado como cirujano de la Escuela de Medicina desde 1979.
Otro punto importante que el doctor Lojo resaltó es que muchos de estos pacientes intervenidos pueden pasar parte del tiempo de recuperación con una ostomía, cirugía que consiste en extraer los intestinos a través de una apertura en la pared abdominal y las heces y orina son recogidas en un dispositivo.
Este tipo de extracción, dependiendo de la severidad de la enfermedad, pudiera permanecer también de forma permanente.
“Todo esto es cuestión de manejo adecuado y prevención. Es bien importante que todos los pacientes sigan el tratamiento al pie de la letra. Muchos de estos pacientes tienen obstrucciones parciales y lo que hacemos es le eliminamos la fibra de la dieta”, explicó.
El que pacientes con menos acceso a transportación de regiones centrales de la isla no se traten a tiempo fue otras de las preocupaciones que el doctor Lojo expuso. Desde la década del 1970 al 2000 estas enfermedades crónicas aumentaron en un 81%, apuntó.
“Un intervención temprana puede cambiar una vida”, abordó.
Díficil acceso
De otra parte, el doctor Roberto Vendrell, gastroenterólogo y parte de la facultad del Centro de Enfermedades Inflamatorias del Intestino de la Universidad de Puerto Rico (UPR), señaló que el difícil acceso de los tratamientos de los pacientes por parte de los planes médicos se ha convertido en un obstáculo en la emisión de diagnósticos de estas enfermedades en la isla.
Además, el problema ha ocasionado el aumento en la severidad de las EII en los pacientes que las desarrollan.
“Uno de los mayores problemas que tenemos es el acceso de los pacientes a los medicamentos (para estas condiciones). A veces el médico primario no lo refiere (a los gastroenterólogos) por alguna razón o estos pacientes no tienen acceso a los médicos”, confesó.
“Desafortunadamente ocurre más de lo que nosotros quisiéramos. Nos hemos reunido con las aseguradoras para ver si se establece algún centro para que estos pacientes tengan un acceso más directo a nosotros en vez de ir al médico primario”, estipuló.
Por: Belinda Z. Burgos González – http://www.medicinaysaludpublica.com/