Cirugía experimental, trasplante e inmunología. Mentor de médicos y cirujanos, co-editor del primer libro en español sobre trasplante, hoy en su tercera edición, y cerca de 2 mil riñones trasplantados durante el ejercicio de su carrera entre pacientes adultos y pediátricos.
De la mentoría y asesoría del Dr. Francisco Raffucci -pionero en cirugía de corazón-, se convirtió en una de las figuras que tomó la batuta quirúrgica y administrativa para la fundación de los Programas de Trasplante del Hospital Veteranos, Auxilio Mutuo junto con la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) desde inicios del 1970. Esto lo logró al regresar de su entrenamiento en inmunología, trasplantes de riñón, y fundamentos de hígado y páncreas en la Universidad de Minnesota.
Cabe señalar que los primeros trasplantes se realizaron en la ciudad de Ponce en el 1968.
“Realizaron los primeros 20 trasplantes de riñones y fueron los verdaderos pioneros, pero en una época donde no existían los medicamentos necesarios ni el conocimiento inmunológico suficiente, no habrían de lograrse resultados a largo plazo”, aseguró.
“Cuando regresé a Puerto Rico para allá los 70 no habían leyes que pudieran regir los trasplantes, infraestructuras, no había hospital para trasplante, ni personal entrenado, ni datos; había una actitud temerosa de los médicos, y enfermeras, sobretodo con la donación cadavérica. No había alianzas con otros países, anestesiólogos de trasplantes y se usaban cantidades enormes de sangre en hígado(…)”, rememoró.
Cuando entonces se logró fundar el Programa de Trasplante de Puerto Rico luego de crear la infraestructura y el andamiaje necesario, el servicio de donante era dirigido por el Dr. Ernesto Rivé Mora, quien lo guió por espacio de 35 años.
Como el servicio estaba teniendo una alta demanda en población no veterana, luego de los exitosos 135 trasplantes -incluyendo el primero en el 1977 oficialmente bajo un programa de trasplante-, se consideró la movilización del programa, siendo el Hospital Auxilio Mutuo quien aceptó dicha encomienda.
“Entre los trasplantados entre el 1977 y el 1979, unos 20% de ellos siguen vivos con su riñón trasplantado”, sostuvo el especialista.
El 21 de septiembre de 1983 se llevó a cabo el primer trasplante de riñón de donante vivo del Hospital Auxilio Mutuo como el inicio del nuevo programa en dicha institución.
El equipo de trasplante demostró el éxito de dichas intervenciones en la isla, donde estos pacientes, al año de su operación, el 98% estaban vivos y sobre el 96% de los riñones trasplantados continuaban su función.
“Se trasplantaron (riñones a) más de 100 niños y aún bebés que pesaban entre 12 y 20 kilos, y muchos de ellos están vivos con su trasplante. También se trasplantaron a personas mayores o con diabetes, todos con buenos resultados. Trasplantamos sobre 40 pacientes con 70 años o más y cinco de sobre 80 años. La edad no puede ser un factor para excluir a un paciente del beneficio de esta cirugía si gozaban de tener buena salud y eran funcionales”, afirmó.
Otro de los logros que se le pueden destacar al equipo es su autoría de sobre 200 publicaciones científicas y varios cargos en la Universidad de Puerto Rico (UPR) y otras instituciones.
Santiago Delpín fungió como Decano Asociado de Ciencias Biomédicas del 1988 al 1990 y como director del Departamento de Cirugía entre 1990 y 1993, ambos en la UPR. Fue director y participó de las fundación de organizaciones tales como la Fundación Puertorriqueña del Riñón, el Consejo Renal, la Junta de Disposición de Órganos, Cuerpos y Tejidos de Puerto Rico, la Sociedad de Alergia e Inmunología, el Foro Raffucci, el Registro Latinoamericano de Trasplante, la Sociedad Panamericana de Diálisis y Trasplante, la Sociedad de Trasplante de América Latina y del Caribe, entre otras decenas de asociaciones médicas de las que ha formado parte.
A pesar que durante los primeros 20 años la donación de órganos en Puerto Rico fue escasa, cirujanos como el Dr. Luis Morales Otero, director médico de LifeLink ayudó a establecer la alianza con LifeLink Florida y la fundación de LifeLink Puerto Rico, lo que resultó en un aumento dramático en las donaciones y ha posicionado a Puerto Rico en el lugar número 26 en el mundo y número uno en América Latina al medirse la cantidad de trasplantes por cada millón habitantes.
Anteriormente la donación aquí había sido muy limitada. El Dr. Morales con su equipo ha continuado con programas de educación en donación y trasplante, y ha participado de iniciativas en los Estados Unidos.
El advenimiento de Lifelink permitió entonces el inicio y desarrollo de los programas de trasplante de corazón, páncreas, hígados y combinados.
“No se pudo realizar el trasplante de hígado antes porque no teníamos un intensivo dedicado, intensivistas y las grandes cantidades de sangre. Comenzamos desde el 1993 a trabajar con esto, pero nosotros tres no podíamos con todo. Establecimos la infraestructura, redactamos las leyes necesarias, el financiamiento, educación a todos los sectores desde el laboratorio hasta nutricionistas, enfermeras, entre otros”, señaló, refiriéndose a sus otros colegas de labores, la Dra. Zulma González, primera trasplantóloga mujer y el Dr. Luis Morales.
Cabe señalar que la Dra. González fue de las primeras cirujanas de trasplante en el hemisferio y la primera especialista en entrenarse parcialmente en cirugía de páncreas para el 1982. Luego entró el Dr. Diego Solís quien fue pionero en el trasplante de páncreas y comenzó cirugía hepatobiliar como un servicio a partir del 2005.
Más adelante, el Dr. Carlos del Coro y luego el Dr. Pedro Hernández continuaron con páncreas. González también fue desarrolladora y promotora de programas y educación en medicina crítica y de en nutrición e inmunología en PR y América Latina, al igual que de programas educativos innovadores,
“El precepto principal es el paciente primero. Un programa de trasplante es de todo el país. El éxito se debe a la obra de todo un equipo en todos los niveles, y con comunicación continua entre todos. No hubiera habido logros si el Hospital de Veteranos no hubiera abiertos las puertas para establecer el programa, al igual que el Hospital Auxilio Mutuo, con un concepto que era visto como experimental en aquella época. El gobierno también apoyó todo el tiempo”, sostuvo Santiago Delpín.
“Tampoco sin los coordinadores, trabajo social enfermeras, secretarias, nutricionistas, psiquiatras, personal de apoyo, administradores, consultores, los servicios del hospital y otros que funcionaron siempre como un equipo integrado. La educación contínua y la comunicación fueron clave. Los nefrólogos, incluyendo pediátricos, fueron medular en este éxito conjunto el éxito ha sido de todos”, finalizó.
Hoy día Centro de Trasplante del Hospital Auxilio Mutuo es dirigido por el cirujano español, Dr. Juan del Río Martin.
Parte de la información fue suministrada a la Revista de Medicina y Salud Pública (MSP) por el Dr. Santiago Delpín, a través de una publicación académica de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas (Buhiti), y por entrevistas con los doctores Morales y González.